Imprimir
Visto: 1434

zabaleando las tunas

Las Tunas.- Este 31 de marzo, en el contexto del Proyecto Zabaleando, se celebró el Día del Libro Cubano y el aniversario 33 de la editorial Sanlope con varias actividades y la participación de artistas del territorio.

El ritmo contagioso de la conga Los Dandys del 50, del municipio de "Amancio" dio la bienvenida a la cita, acaecida -como es tradición- en la calle Adolfo Villamar, número 130. Con el abrigo de la comunidad se desarrollaron en el lugar expoventas de libros, presentaciones artísticas, agasajos y otras acciones.
zabaleando1 las tunasUno de los momentos especiales fue cuando Edilberto Agüero Rodríguez, más conocido como Eddy Zabala, entregó un reconocimiento al intelectual Carlos Tamayo, por sus aportes a la cultura.

Este autor, in situ, firmó su libro Al dulce nombre de mi patria unido, a quienes lo compraron en ese marco. Además, donó al proyecto títulos de diferentes creadores con el fin de idear allí una casa biblioteca, hecho que de concretarse aportaría grandemente a la cofradía.

Eddy también reconoció a la editorial Sanlope en su cumpleaños, entregando un certificado a Maike Machado, director del Centro Provincial del Libro y la Literatura. Este último directivo compartió con los presentes datos en torno a la efeméride de la víspera y, junto a Saimy K. Torres, directora del centro de promoción literaria Pablo Armando Fernández, otorgó formalmente el Premio Nacional Principito 2023 al escritor Aleido Rodríguez, resultado dado a conocer recientemente, al cierre de la 32 Feria del Libro y la Literatura en Las Tunas.

Asimismo, Zabaleando agasajó a Los Dandys del 50, por sus 75 primaveras en defensa de nuestro folclor. El maestro concertista Félix Ramos, compañeros destacados en la comunidad y otros hacedores, también recibieron palabras de agradecimiento.

Un elenco variado de artistas profesionales e integrantes del Movimiento de Artistas Aficionados aderezó el encuentro, entre ellos el grupo Memory, el mago Dennis, la solista Dalía Macayo y maestrantes vinculadas a la manifestación musical. No podían faltar los hijos del Proyecto Zabaleando (nacido hace apenas un añito) como infantes que demostraron allí sus dotes danzarios y la niña Denisse, que interpretó Drume Negrita, de Bola de Nieve.

Para mayor simbolismo, acompañaba la cita un pendón con la imagen de Edilberto Agüero ("Zabala"), aquel carpintero de profesión y artista innato que dio vida a la comparsa Zabala, parte indisoluble de la historia cultural de esta localidad. Tampoco faltaron los tambores, las trompetas, los pies sandungueros o la torcedora de tabaco en plena faena.

Al observar ese ambiente criollo, junto a las sonrisas de las personas, recordé unas palabras que Eddy me confesara tiempo atrás: "Soy parte del patrimonio folclórico de este pueblo, al que no puedo renunciar". Esa es la convicción que necesitamos para echar a andar nuestra cultura. Eso es construir identidad.