Las Tunas.- La satisfacción por el deber cumplido inunda a los trabajadores de la unidad empresarial de base Enrique Casals Villarreal, de la ciudad de Las Tunas, pues en la fábrica de igual nombre y el taller ubicado en la comunidad de Becerra produjeron seis millones 600 mil tabacos.

Transcurrieron 12 años desde el último éxito productivo de la añeja institución -fue fundada como tal en 1962- y ahora el colectivo dio un vuelco a esas circunstancias, a pesar de muchos inconvenientes con la garantía de materia prima y por la falta de fluido eléctrico.

Arturo Camejo López está al frente del equipo desde hace poco más de un año y, aunque este plan era superior a los de otros calendarios, diseñó una estrategia para incrementar la cantidad y calidad de los puros con menos obreros, pues no son suficientes los torcedores.

“Lo primero que hicimos fue motivar a los trabajadores para que se comprometieran porque ese iba a ser un resultado de todos. Se conversó con ellos y se les atendió como merecen. Luego nos unimos para buscar soluciones ante la carencia de materia prima y la inestabilidad electroenergética.

“Ajustamos los horarios de trabajo y la fábrica arrancaba cuando llegaba la corriente. Algunos días comenzábamos a las 5:00 de la mañana o terminábamos tarde en la noche. Incluso, sábados y domingos, que son los días habituales de descanso.

“También quiero destacar que la Empresa de Acopio, Beneficio y Torcido de Tabaco adquirió equipos para generar electricidad y que, gracias a la contribución territorial del uno por ciento, se compraron vapores (mesas de labores), taburetes y otros insumos, que impulsaron las producciones”.

El año 2024 se presenta con nuevos retos para la “Enrique Casals”. Uno, superar los siete millones de unidades para el consumo nacional. Otro, formar personal calificado mediante cursos de capacitación y a través de convenios con los ministerios del Interior y de Educación.

Desde el pasado mes de julio, en los portales de la entidad se comercializan tabacos de manera liberada, a 12.00 pesos cada uno, una alternativa que ha tenido notable aceptación entre los tuneros y que oxigenó tanto la economía de la fábrica como el plan de torcido.