Las Tunas.- Velar constantemente por añadir nuevos rubros y preparar su fuerza técnica para hacerlo con calidad son las prioridades de la exportación desde esta provincia del oriente cubano; así convinieron diversos actores económicos y de Gobierno tras dar una mirada conjunta a dicho frente durante el 2021 aquí.
Vivian Herrera Cid, directora general de Comercio Exterior del Ministerio de Comercio Exterior y la Inversión Extranjera, elogió los progresos de Las Tunas en estructurar una estrategia de promoción de la exportación y la sustitución de importaciones a nivel territorial. El Balcón del Oriente Cubano tiene ante sí, dijo, el reto de establecer un polo exportador a partir de las potencialidades de productos como la miel de abejas y las producciones agropecuarias; y también, acotó, el de capacitar mucho más a los especialistas de las empresas estatales y no estatales del territorio en los aspectos técnicos relacionados con el comercio exterior.
El bloqueo económico estadounidense se ensaña con los mecanismos de exportación, recordó Herrera Cid; porque no solo impide el acceso a proveedores sino que, incluso, entorpece las operaciones comerciales de la Mayor de las Antillas en cualquiera de sus etapas. Por lo cual, insistió, los empresarios cubanos deben ser previsores y trabajar diferente a partir de las lecciones dejadas por la etapa más dura de la pandemia de la Covid-19.
De cara a la exportación, igualmente enfatizó en la necesidad de que las entidades criollas no descuiden el registro marcario de sus renglones como un modo de preservar el acceso a los mercados internos e internacionales. Es importante, expresó, utilizar al máximo los proveedores nacionales para aspectos claves como los envases y embalajes. También recomendó no descuidar el apego a las regulaciones relacionadas con la inocuidad, seguridad y trazabilidad de cada una de las mercancías potencialmente válidas en los mercados foráneos.
“Necesitamos a la Universidad de Las Tunas para la capacitación en materias de comercio exterior e idiomas”, instó. En este sentido calificó de loable el trabajo de la provincia, y exhortó a la comprensión cabal sobre las normativas aprobadas para dicha actividad comercial. Apicultores y pesqueros, concluyó, tienen el desafío adicional de prepararse para la inspección de la Unión Europea y China en pos de la renovación del registro que hoy les posibilita estar presentes en esos mercados de exportación.
A juicio de empresarios y especialistas tuneros, en los últimos años dio un vuelco positivo la interacción entre los diferentes actores del territorio en aras de potenciar la exportación; aunque todavía, admitieron, eso no se ha expresado como debiera en incrementos claros en la cantidad de bienes exportables ni en los ingresos que estos generan. Adicionalmente creen que existen cuestiones por revisar en lo concerniente al enlace entre las importadoras y las entidades locales, incluyendo las privadas de reciente formación.
Las Tunas mantiene 28 rubros exportables, cuyos surtidos líderes son las palanquillas de acero al carbono, el azúcar crudo, las producciones pesqueras, el carbón vegetal y los servicios portuarios. Estudios realizados indican que puede avanzar en otros como el tabaco, incluso, en renglones adicionales derivados de la producción azucarera y los asociados a los servicios académicos y de auditoría. De hecho, se han identificado 14 empresas capaces de sustituir importaciones con unos 26 productos diferentes.