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Raul Nina Beso
Las Tunas.- Has demostrado que el coraje viene de estirpe y convicción, de sangre fuerte y valiente. ¡No hay un día en que la Patria y sus hijos no te agradezcan la paz y esa manera peculiar de enfrentar las dificultades y desnudarlas! Por estas llanuras de Las Tunas nadie olvida las manos que estrechaste, los abrazos y cada frase contundente y jovial que dejaste como faro en tus visitas. Tus constantes enseñanzas, General de Ejército Raúl Castro Ruz.

Hoy 3 de junio cumples 91 años. Es muy bueno saberte entre nosotros con la sabiduría del revolucionario de ejemplar vocación e infinita humanidad. Con el verbo jocoso, pero preciso. Con la rectitud de la palabra y el respeto al compañero, hecho cercanía con la palmada en el hombro o el apretón de manos.

O esa impronta infinita de amor por los niños y el desvelo interminable para que las cosas estén en su lugar, desde el análisis objetivo y previsor. Tu eterna compañía a golpe de reloj en cada acción del Movimiento 26 de Julio, del Partido Comunista de Cuba, de Fidel y Cuba... en fin, el pueblo, al que le entregaste y entregas la vida que hoy celebramos con un año más.

Salud. Tu obra es tan preciada que ahora mismo, este viernes, sin hacer fiestas tumultuarias, los tuneros festejamos con alegría este onomástico y seguimos aferrados a producir la tierra. No olvidamos el alcance de las misiones ni los imperativos que laten en esa oratoria viva que distingue tus discursos. “Sí se puede” es la máxima que nos une al combate. ¡Y de tu tropa somos, General!

Feliz día. Las botas están puestas. La Caravana de la Victoria no es exclusiva de enero ni quedó para el hito de 1959. Es ahora, cotidiana. Sabemos qué regalo prefieres recibir hoy. Mucho, muchísimo, falta por hacer. La deuda es grande. Mas tú, querido Raúl, eres centella, inspiración, compromiso y reto. No es cumplido, es realidad.

Recibe, pues, de los hijos del mayor general Vicente García el abrazo de confianza. Seguimos en tu batalla, optimistas, como nos muestra el andar desde la Sierra Maestra. Tus huellas están aquí. No perderemos el rastro. Nuevamente, salud. ¡Felicidades, General de Ejército! ¡Felicidades, Raúl! Gracias por las piedras y el camino.