
Sin perder la costumbre implantada en el certamen, los cubanos volvieron a pisar la "goma" en el capítulo de apertura; sin embargo, el botín resultó ínfimo para la magnitud de la amenaza. Desde el primer acto surgieron pistas de lo que sería el encuentro para la ofensiva de los dirigidos por Armando Johnson, con los hits sumados a pares, pero las carreras ausentes.
En la conclusión del quinto episodio, cuando todos los caminos apuntaban a la impotencia de los maderos emergió un swing de Yurisbel Gracial para darle un matiz diferente y, de paso, saldar alguna que otra deuda con la franela nacional. Antes, los boricuas aunaron los esfuerzos justos para tomar la delantera (2x1), desde velocidad en las almohadillas hasta el poder en las muñecas de Yadier Rivera.
Pese a una estancia cómoda sobre el box, Carlos Juan Viera salió del ruedo sin decisión. Aun así la hoja de servicios del As recopiló 4.0 innings de una anotación, par de incogibles e igual cantidad de ponches. Con menor desempeño, pero mejor resultado, Jonathan Carbó asumió la victoria, luego de encarrilar los tres outs de la quinta entrada.
En tanto, el puesto de cerrador cuenta con nombre y apellidos: Yeudis Reyes, quien aprovechó la oportunidad para anotarse un salvamento. Por otra parte, Miguel Mejías arrojó sobre sus hombros el peso de la derrota.
Por si fuera poco el aporte de Roberto Súliban Baldoquín bate en mano, el tunero enseñó credenciales con el guante al disponer con facilidad de situaciones complejas. Después de la actuación frente a los anfitriones (3-2), Baldoquín ancló en los 500 puntos de average, producto de cuatro cañonazos en ocho viajes al home plate.
Con el tránsito apacible hacia la pugna por la corona regional, la Mayor de las Antillas presume su tercera final en idéntico número de participaciones. Si bien la cúspide les ha sido esquiva en ediciones precedentes, la armada de las "cuatro letras" buscará añadir el éxito definitivo ante Curazao en la fecha dominical.