Las Tunas.- Los dislates en la producción de sarcófagos en Las Tunas sí han llegado a afectar directamente a la población.
Eso lo sabe muy bien Rubisnel Pérez González, director de Servicios Comunales en la provincia, quien reconoce que los familiares han esperado el tiempo que ha sido preciso para que el sarcófago esté listo y puedan comenzar los procesos tristes del traslado y velatorio de un difunto.
Y, aunque ha sido en pocas ocasiones y por espacio de dos o tres horas, ya es demasiado duro el momento del adiós a un ser querido como para aderezarlo con carencias de primer orden en la hora nefasta en la que la vida se va.
El directivo explica que los problemas se han presentado, fundamentalmente, en el municipio de Las Tunas; y dice que eso está relacionado con que muchas personas de otros terruños fallecen acá, mientras están en el hospital provincial, por ejemplo, y es esta localidad responsable del traslado del cadáver y todos los procesos relacionados.
Las causas fundamentales, acotó, tienen que ver con la disponibilidad de madera, tela y otros recursos que escapan de la provincia en buena medida y, por supuesto, la entidad intenta tejer alianzas para ir resolviendo.
Así lo había declarado a 26 Eiser Prieto Pons, subdirector de Higiene y Necrología en el territorio. "Las empresas forestales de Las Tunas, Mayarí y Moa nos daban, hasta hace poco, la madera que es necesaria para la producción; sin embargo, por decisión nacional, ahora nuestra provincia asume lo que antes suministraba Moa, que en todo el año solo había aportado seis metros cúbicos, de un plan de 8,3 previstos cada mes.
"Una situación que ha estado dada, mayormente, por carencias con el combustible y también con el fluido eléctrico. La empresa forestal de Mayarí sí nos ha dado 81 metros cúbicos hasta este momento, que es lo que estaba pactado".
El directivo enfatizó ese día, en nuestro diálogo telefónico, en el compromiso y la entrega de los trabajadores para cumplir con su sensible acometido social.
Ahora abunda en el tema el director en la provincia y reconoce que la madera que llegaba desde Moa tenía una mejor calidad que la que ahora se emplea. "Eran cuadrantes de pino especiales para eso y la de aquí de Las Tunas muchas veces es algarrobilla, no es igual, pero con esa estamos trabajando.
"También es bueno que la población conozca que hemos tenido problemas con las telas para hacer los sarcófagos. Nos abastece la empresa textil de Villa Clara y está al 74 por ciento en envío hasta acá del plan previsto que necesitamos. Hemos estado comprando entonces a la empresa mayorista, aunque eso nos afecta el presupuesto y sabemos que no tiene la misma calidad el tejido para esos fines".
Los directivos abundaron en la disponibilidad de puntillas, el seguimiento constante al tema y los desvelos por que las situaciones de este tipo no se repitan. Porque nada puede justificar hacer más hondo el dolor ante la muerte de un ser querido y su vacío, irreparable.