Washington.- La policía estadounidense investiga hoy un nuevo tiroteo registrado durante la madrugada en una taberna en Somers, Wisconsin, en el que tres personas murieron y dos resultaron heridas.
Según informan medios locales de prensa, las autoridades aún buscan al sospechoso del hecho ocurrido en el condado de Kenosha, escenario el año pasado de fuertes protestas luego de que agentes del orden dispararan contra el afronorteamericano Jacob Blake.
El tiroteo de anoche parece ser un "incidente dirigido y aislado", indica el diario The Hill.
Todavía las autoridades policiales no ofrecen información sobre el motivo del hecho, señaló CNN.
De acuerdo con esa cadena de televisión, tras ese incidente dos personas fueron trasladadas a un hospital cercano en estado "grave".
El año pasado, Kenosha vivió momentos de gran agitación debido las fuertes protestas en rechazo al tiroteo de Jacob Blake por parte de la policía, pero ninguno de los agentes involucrados enfrentó finalmente cargos ante la justicia.
Ahora, las banderas en Estados Unidos ondean a media asta en señal de luto por las víctimas de un reciente tiroteo en Indianápolis, mientras crece el debate sobre el control de las armas.
Durante las últimas semanas, se han registrado tiroteos masivos en diferentes lugares de la nación norteña, lo cual enciende alarmas en diversos sectores.
Ante esta situación, el presidente estadounidense, Joe Biden, emitió la semana pasada órdenes ejecutivas destinadas a enfrentar la violencia con esos pertrechos, y consideró que el problema constituye una epidemia y una vergüenza.