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Las Tunas.- Hasta la escuela especial Ramón Téllez acudió Denis Pérez a recibir la primera dosis de "Abdala". Lo hizo convencida de que ese pinchazo es un soplo de vida y, aunque deberá completar su esquema de vacunación, regresó a casa muy feliz y esperanzada. A sus 70 y tantos abriles nadie puede borrar sus certezas; esas que la hacen amar y sentir orgullo de su país. Ella, que ha estado en otras tierras, sabe valorar las esencias que habitan en la suya, y a estas alturas, dice, nadie podrá hacerla cambiar de parecer.

Durante estos meses de pandemia, el hogar ha sido su refugio para mantenerse a salvo. Sin embargo, nunca se está protegido del todo, porque la Covid-19 puede llegar, incluso, de los más cercanos. Hace unas semanas su hijo enfermó, y aunque ella salió airosa estuvo expuesta al riesgo. Por eso, ahora se sabe más fuerte.

Denis reconoce que detrás de tanta felicidad están las manos de muchas personas; desde los científicos hasta el personal del sitio clínico donde recibió la dosis. Cuenta que en ese centro educacional, habilitado para el proceso y ubicado en el área de Salud del policlínico Manuel (Piti) Fajardo, prevaleció la organización y el buen trato, y eso, claro está, siempre se agradece.

Ciertamente, la vacunación masiva con "Abdala" en el municipio de Las Tunas ha demandado el apoyo de muchos, y el sector de Educación no ha dejado de acompañar este proceso esperanzador para todos los tuneros.

Abiel Marino Cajides, director del sector en la capital provincial, explicó que directivos y trabajadores contribuyen a su buen desarrollo, y otros están listos para cumplir cualquier tarea asignada. “En estos momentos tenemos 36 escuelas que asumen la inmunización, las cuales poseen las condiciones para que nuestra población reciba una adecuada atención.

“Apoyamos, específicamente, en el Consejo Popular 4, perteneciente al área de Salud del policlínico Guillermo Tejas, que cuenta con seis vacunatorios, ubicados en consultorios médicos de la familia. Los centros educacionales también han ayudado en el engalanamiento y aportaron recursos para asumir esta misión”.

Marino Cajides reconoció la disposición de las personas y la disciplina con la que han acudido a estos locales; muestra de la confianza en Abdala, la primera vacuna de vacuna anti-Covid-19 de América Latina, que registra un 92,28 por ciento de eficacia en su esquema de tres dosis y un ciento por ciento para prevenir la enfermedad sistémica severa y la muerte.

“De conjunto con la familia hemos realizado un trabajo de convocatoria para lograr la mayor asistencia, y estamos seguros de que la inmunización será un éxito. En cada uno de nuestros consultorios se halla el listado con los nombres de quienes deben vacunarse y así evitar las aglomeraciones que propician la transmisión del virus. Quienes controlan el proceso solo dejan acceder al consultorio a las personas que recibirán las dosis”, afirmó.

En el municipio cabecera se prevé inmunizar una cifra superior a los 159 mil habitantes mayores de 19 años; de ellos, más de 45 mil pertenecen al policlínico Manuel (Piti) Fajardo, unos 42 mil al “Aquiles Espinosa”, más de 25 mil al “Guillermo Tejas”, alrededor de 45 mil al “Aldereguía Lima”, y más de siete mil al “Arcos Luque”, de Bartle.

Abdala está en las comunidades y con ella la esperanza de los tuneros de vencer el virus, pero habrá que reforzar las medidas para lograr ese propósito común.

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