Las Tunas.- Varias han sido las personalidades de la cultura cubana y de la música de nuestros campos que se acercaron a esta edición de la Jornada Cucalambeana, nuestro periódico conversó con dos de los que más cerca han vivido estas fiestas.
Emiliano Sardiñas Copello considera que su crecimiento artístico está muy ligado a este Guateque. "Soy de los artistas que por más tiempo ha venido a estas celebraciones, ya son 31 años ininterrumpidos con esta edición. He estado desde las celebraciones de base, municipales hasta llegar a El Cornito.
"Me siento bien en muchos espacios como el Catauro de la Décima, en el que los decimistas encontramos un refugio sentimental, un rincón amoroso donde no solo se va a leer; ahí vamos a abrazarnos, encontrarnos en las ruinas que allí resisten el tiempo y absorben nuestra energía. Cruzamos saludos, afectos, para nosotros es un ritual, una rutina necesaria e imprescindible cada vez que haya Jornada Cucalambeana".
Para Emiliano es como volver a una casa que conserva en otro lugar, donde se siente como en familia.
Hasta estos predios llegó Antonio (Tony) Iznaga, más conocido en la Isla como El Jilguerito, quien cada año acompaña estas celebraciones y guarda en el corazón el cariño de los tuneros hacia su familia.
De Las Tunas siente que: "Es un pueblo que disfruta a plenitud el género campesino, la música tradicional que hacemos.
"Desde mis padres, Inocente Iznaga (El Jilguero de Cienfuegos) y Martica Morejón, toda una vida nos han acogido con mucho amor. A estas tierras me atan disímiles emociones y sucesos, grandes compositores de aquí han hecho canciones que interpretó mi padre y que ahora canto yo. Es gratificante sentir la cercanía con la que nos piden esos temas en toda Cuba.
"Canto punto guajiro desde niño, me gusta el son montuno y constituye una tradición estar cada año en la Cucalambeana.
"Pofesionalmente vengo desde 1992, pero he crecido en este lugar. Desde que tenía 4 años, venía con mis padres y nos hospedábamos en El Cornito, conozco ese sitio como la palma de mi mano.
"Viví aquello de la música del órgano toda la noche y la presencia de artistas de otros géneros como Pedro Luis Ferrer, Miriam Ramos, que prestigiaban el evento.
"De Las Tunas he recibido mucho, tuve el honor de que me dieran el Sello por un aniversario más de la Jornada y ahora me acaban de otorgar la Placa por los 195 años de El Cucalambé. Otras de las muchas atenciones de los tuneros".
Las palabras de agradecimiento y apego a esta Jornada, el sentir de grandes de la cultura de nuestros campos, llegan a la fiesta mayor del campesinado cubano para dejar huella de su importancia.