Santiago de Cuba.- Ofrendas florales del General de Ejército Raúl Castro, líder de la Revolución Cubana, y de Miguel Díaz-Canel, primer secretario del Comité Central del Partido Comunista de Cuba (CCPCC) y presidente de la República, acompañan las honras fúnebres del destacado trovador Eduardo Sosa, fallecido este miércoles en Guantánamo.
De igual forma a la Casa de la Trova, ubicada cerca del céntrico parque Céspedes, de esta urbe, llegaron arreglos a título de Esteban Lazo, presidente de la Asamblea Nacional del Poder Popular (Parlamento), del CCPCC, de los ministerios de Cultura y del Interior, del Parlamento, el pueblo cubano, del Instituto Cubano del Libro, el Comité Nacional y Provincial de la Unión de Escritores y Artistas de Cuba (Uneac), de familiares y amigos, entre otras.
Desde horas de la mañana de este miércoles el pueblo de la ciudad creativa en la música, cuna de la trova, el son y el bolero, rinde sentido tributo a quien fuera una de las voces más reconocidas de la trova cubana.
Díaz-Canel lamentó esta mañana en la red social X la muerte del célebre cantautor, a quien describió como el orgulloso hijo de Tumba Siete, entusiasta organizador del Festival de la Trova y ganador con su obra de un lugar en el panteón de los grandes, junto a importantes trovadores cubanos.
De igual forma, el primer ministro cubano, Manuel Marrero, expresó su pesar por el fallecimiento de Sosa, a quien consideró un destacado compositor, trovador, revolucionario que siempre le cantó a Cuba, a su Patria.
Marrero envió condolencias en nombre del Gobierno y del pueblo cubano a su familia y amigos.
Eduardo Sosa Laurencio (Mayarí, Santiago de Cuba, 18 de abril de 1972-Guantánamo, 12 de febrero del 2025) al momento de su deceso se desempeñaba como vicepresidente de la Uneac y como diputado a la Asamblea Nacional en su Décima Legislatura, y tuvo una valiosa obra musical que lo posicionó como una de las principales voces de la llamada Nueva Trova.