Las Tunas.- La temporada estival recién concluida dejó un sabor agridulce en muchas familias tuneras, que todavía magulladas por las consecuencias de las paralizaciones y el encierro de la covid-19 ansiaban, sobre todo los más chicos, que fueran meses de diversión en el más amplio sentido. Sin embargo, al calor sofocante lo secundaron altísimos precios, carencia de ofertas y una calma aplastante en casi la etapa completa, interrumpida solamente por algunos bafles que en "áreas fijas de verano" atormentaban a toda hora sin compasión a los vecinos de esas comunidades.
El usuario Alberto Hernández reflexionaba hace unos días en la página de Facebook de 26 que "lo que piensas que pudiera ser factible se vuelve una utopía, por ejemplo, algo tan sencillo como un día en la playa. Antes planificabas tu almuerzo y rellenabas con las chucherías que vendían allí, pero ahora no puedes pensar en comprar algo extra porque se dispara el gasto a un nivel que no se cubre con un mes de salario, sin contar el transporte. Y yo solo tengo un hijo, no imagino los que tengan dos o tres".
Susana Cabrera considera que "los padres tienen infinidad de limitaciones, desde las pocas opciones de recreación y los precios excesivos, no solo para sacar a pasear a los hijos, sino también para su propio ocio.
Actualmente es una proeza para la familia disfrutar las vacaciones con nuestros niños, hay que hacer maravillas, sacar el tiempo, los recursos y el ánimo de donde no hay; literalmente, hacer magia…".
No han sido pocos los comentarios realizados en las publicaciones de 26 con relación a estos asuntos, tampoco son leves las insatisfacciones planteadas a nuestra Redacción relacionadas con las opciones veraniegas. A propósito del tema nos acercamos a dos atracciones que marcan el pulso en los meses de julio y agosto por estos predios.
SOL Y PLAYA, DESTINO IMPRESCINDIBLE
Mairelys bajó de la guagua con tremendo equipaje y sus dos gemelos de 7 años de edad, Alejandro y Alexis. Aunque entró a la cabaña sin grandes expectativas, más que un lugar austero, aquello se veía sucio y con cara de abandono. Dos literas y una cama con colchones manchados, un televisor roto y un tanque viejo y oxidado para almacenar el agua componían el panorama. Las lámparas y bombillos brillaban por su ausencia; el refrigerador, aunque un poco maltrecho, funcionaba.
"El viaje me lo dieron como premio en mi trabajo y los niños estaban muy felices porque el esparcimiento que había podido proporcionarles era ir a jugar al parquecito de mi barrio, pero al llegar y ver aquello sentí, como dice una, que se me caían las alas del corazón. Por suerte, los vecinos de la cabaña de al lado, nos prestaron un bombillo y así pudimos alumbrarnos. Al final uno logra acomodarse y los pequeños disfrutaron de la playa que era el principal objetivo", sentencia como para darse ánimo.
Al igual que Mairelys, cientos de familias tuneras acudieron durante el verano a villa La Boca, sitio destinado al estímulo de los trabajadores donde los organismos tienen habitaciones asignadas, y la única opción que pueden permitirse muchos de quienes integran los colectivos laborales. En la opinión de los vacacionistas predomina el agradecimiento por que se mantenga esa oferta, en medio de las difíciles condiciones económicas que atraviesa el país, pero también sugieren mayor atención por parte de sus entidades.
"Algunas empresas arreglan muy bien sus cabañas, sencillas, pero confortables; sin embargo, otras tienen malas condiciones. Todas las instituciones no disponen de los mismos recursos, pero aun así eso no debería ocurrir, porque lo que ha de considerarse sinónimo de reconocimiento al esfuerzo de un año se convierte, en buen cubano, en 'ir a pasar trabajo'", comenta Arturo Guerrero a 26. A su vez, reconoció el trato afable del personal de carpeta y la cocina, además del abasto de agua con regularidad.
En muchas ocasiones, la solución a los problemas que deben sortear allí las familias para disfrutar de las bondades del balneario no requerirían excesivos gastos.
Algunas demandan más sensibilidad e ir a los detalles. La ubicación de depósitos con la higiene requerida para el agua potable, un sistema de recogida de residuos, condiciones de la cocina central para la elaboración de los alimentos (actualmente es con leña), la recuperación del parque infantil con el que contaba la instalación, garantizar el alumbrado de las cabañas y mantener arreglados los equipos electrónicos que se encuentran en sus interiores resultarían un buen punto de partida.
En un escenario ni siquiera ideal, podrían diseñarse actividades culturales en las noches de La Boca, que de seguro contribuirían, sumado a otros elementos, a hacer de la estancia en el sitio un verdadero divertimento, no solo para los huéspedes de la villa, sino, además, para las altas cifras de veraneantes que convierten a ese paraje en su principal destino de recreo.
"Muy bien la cantidad de cestos que agregaron este año, opinó Dayana, muy mal que las personas continúan arrojando los residuos fuera de ellos, incluso, en el mar. Una de las cuestiones que señalaron los científicos que realizaron recientemente el Bojeo a Cuba fue el exceso de plásticos y latas que hay en el fondo marino de los litorales del país".
Reynaldo Pérez, por su parte, considera que a los cuentapropistas que laboran en las playas durante las vacaciones deberían favorecerlos desde el punto de vista fiscal con la condición de que bajen sus tarifas, pues son impagables muchas de las ofertas de comestibles.
A pesar de la crisis extrema que presenta el combustible, el transporte hacia las playas del norte tunero fue algo que se organizó mejor que en etapas precedentes; aunque tuvo sus sombras, como jóvenes marcando en la cola desde el día antes y durmiendo en la terminal para poder alcanzar un turno en las guaguas baratas, porque eran muy pocas. No se satisfizo toda la demanda, pero el delegado del Transporte en Las Tunas, Reynaldo Reyes Silva, refirió a 26 que todo el sistema de su sector se puso a disposición de la Terminal de Ferrocarriles y de los organismos, a partir de lo que tenían diseñado en sus planes vacacionales.
"Trabajaron un promedio de 12 a 14 medios, cada día salían de esa terminal entre cuatro y cinco guaguas, a las que se les incorporaban un grupo de actores como trabajadores por cuenta propia (TCP) y mipymes, a quienes se les asignaba el carburante con el apoyo del Gobierno. También se aseguró, después de varios años sin esta modalidad, el plan vacacional de la Central de Trabajadores de Cuba (CTC), con más de 300 personas en cada una de las rotaciones, y se incorporaron dos campamentos universitarios que no estaban previstos y se protegieron", sostuvo el directivo.
"Durante los fines de semana trasladamos hasta esa zona un promedio diario de dos mil 500 a tres mil viajeros, el resto de la semana se mantenía entre mil y mil 200. Se detectaron violaciones en los precios aprobados para estas transportaciones, los cuales eran de 60.00 pesos hasta el municipio de Puerto Padre y 30.00 más hasta la playa. En el caso de 'Jesús Menéndez' tenía un costo de 90.00 pesos y un aumento de 35.00 hasta La Herradura.
"Ciertos actores aprovechaban los fines de semana, los dos días con más afluencia de público, para aumentar las tarifas, pero afortunadamente en la mayoría de los casos fueron detectadas las infracciones y corregidas. Los que incurrieron en esos hechos recibieron una sanción. En algunos sucesos tuvimos la participación directa de la población a partir de sus denuncias; en otros momentos no fuimos muy acompañados", argumentó Reyes Silva, quien no dejó de reconocer, además, los dilemas en torno a las patanas que en más de una ocasión generaron tensiones y causaron malestar.
UN PARQUE… ¿DE DIVERSIONES?
El pasado domingo 16 de julio, Día de los Niños, Jaime Gutiérrez Rodríguez y su esposa decidieron celebrar la fecha llevando a sus hijas al Parque de Diversiones, pero estaban lejos de sospechar que la jornada estaría marcada por la decepción. No había ningún ómnibus local cubriendo esa ruta, por lo que quedaron a merced de coches y mototaxis para la ida y el regreso, a precios excesivos de oferta y demanda.
Ya en el lugar encontraron varios equipos rotos y otros funcionando con dificultad, así como escasas ofertas gastronómicas. "Cuba se encuentra en una crisis económica recrudecida y sé que existen varios recursos que no están a nuestro alcance, pero muchos de esos problemas se podían haber resuelto para propiciar que nuestros niños pasaran un día a la altura de lo que se merecen", dijo Jaime a 26.
"El verano en las instalaciones del complejo Zoológico-Parque de Diversiones fue deprimente en comparación con ediciones anteriores", manifestó Luis Vázquez Cutiño, jefe de Grupo de Gastronomía allí. "El transporte afectó grandemente, por lo que la afluencia de público fue mínima. El trencito que llega hasta acá presentó contratiempos que impidieron la movilidad de personal y la ruta 1 no trabajó".
Al respecto, el delegado del Transporte en Las Tunas explicó que el trencito estuvo fuera de circulación por reparaciones que ya estaban previstas. Ese destino se les asignó a dos cuentapropistas, a los cuales les facilitaron el combustible para que suplieran el recorrido de la ruta 1, algo que a todas luces no tuvo el resultado deseado.
"Las ofertas gastronómicas se mantuvieron, pero no fueron como en citas pasadas. No tuvimos confituras, ni caramelos; sí contamos con helado, nos entregaban 20 tinas cada dos o tres días, y unas dos mil bolsas de refresco Coral semanal, así como pequeñas cantidades de pan".
Yamisleidy Peña Oduardo, jefa del Grupo de Recreación en ese complejo, asegura que no lucieron sus mejores galas. "Tuvimos representantes del Instituto Nacional de Deportes, Educación Física y Recreación (Inder) con nosotros todo el tiempo, no así de Cultura. Por suerte, contamos con TCP que trajeron inflables, y eso propició otras atracciones porque, por ejemplo, el avión de Cubana tuvo afectaciones que solo lograron resolverse al final del verano con el esfuerzo de los compañeros de Metunas; y las sillas voladoras, cuya reparación ha estado a cargo de Acinox Las Tunas, no funcionaron durante estos dos meses.
"Nos llegaron muchas quejas, algunos padres cuestionaron el elevado precio de los privados, lejos de su solvencia económica, mientras que el resto se quejaba de tener que alquilar coches o cocotaxis para moverse hasta acá".
En las últimas semanas, expertos de esas empresas mencionadas han trabajado arduamente en aras de que los niños puedan disfrutar de las atracciones habituales del sitio. Metunas se encargó de reparar el piso, puertas y pestillos de los aviones de Cubana y de pintar las sillas voladoras, según declaró a nuestro medio su director adjunto, Albert Joseph Bisset.
Osvaldo Reyes Pérez, especialista principal de la Unidad de Mantenimiento Industrial de Acinox, comentó que una brigada de eléctricos y mecánicos de la entidad intervino en la recuperación y puesta en marcha del sistema de transmisión del avión de Cubana y de los barquitos, del mecanismo de transmisión y rotación de las sillas voladoras y del acoplamiento, las ruedas dentadas y el motor eléctrico del trineo.
No es la primera vez que el éxito de las labores desplegadas por ambas instancias alarga la vida de los añejos aparatos, demostrando, una vez más, la importancia de dichas alianzas. Sería muy satisfactorio, además de lograr la sostenibilidad en el funcionamiento, que las revisiones y reparaciones se realizaran siempre antes de que iniciara la temporada del año en la que mayor demanda tiene el único parque de este tipo con el que cuenta la provincia.
JUNTOS, SE PUEDE
Las opciones estivales requieren ser diseñadas con mayor intención y previsión. Es cierto que la etapa transitó en medio de severos dilemas, no hay lugar para el derroche de recursos, pero se imponen las iniciativas. No podemos renunciar a que cada persona pueda encontrar un espacio en familia o algo que le guste hacer a costos que pueda pagar. La playa o el Parque de Diversiones son solo dos botones de muestra de cuánto necesitamos que los engranajes se muevan con eficacia y visión.
La recreación en sentido general ha suscitado no pocas preocupaciones. En las últimas sesiones de la Asamblea Nacional del Poder Popular, el presidente cubano, Miguel Díaz-Canel Bermúdez, insistió en la necesidad de romper apatías y abrirse paso ante las quejas y las dificultades, con más articulación entre organismos e instituciones.
"Es esencial, dijo, una mirada integral, y deben valorarse las necesidades de niños, adolescentes, jóvenes y adultos mayores. La pandemia nos paralizó y nos ha dejado un eslabón de inercia en el ámbito recreativo, del que ahora parece que estamos despertando; pero hay que terminar de hacerlo ya. En muchos lugares existen, pese a todos los obstáculos, diversas ofertas y eso demuestra que la actitud de los decisores de los procesos incide. La manera en la que buscamos las soluciones determina el resultado que deseamos obtener".
Aunque cerramos el verano, la vida cultural y social deben estar vivas el año completo. Estos meses son solo la excusa perfecta para sacar a relucir lo mejor de nuestro arte, deporte y tradiciones, para el disfrute pleno del pueblo y eso, sin dudas, podemos hacerlo mucho mejor.