Las Tunas.- Cada sábado, la academia de ajedrez Armando Laguna es sede de un torneo con la participación de estudiantes, maestros y aficionados del deporte ciencia. Este evento forma parte de la iniciativa que busca establecer una rutina para convertir al ajedrez en un motor cultural, recreativo y educativo dentro de la comunidad.
Claudia Fonteboa Sánchez es una niña de 12 años de edad que desde hace dos calendarios encontró en el mundo de los trebejos una herramienta para desarrollar nuevas habilidades. Su padre, Yosvani Fonteboa, la acompaña y destaca cómo este juego ha influido en su vida. "Ella es bastante hiperactiva y el ajedrez la ha ayudado a controlarse, a pensar antes de actuar. Eso se ha notado incluso en la escuela", expresa. Claudia no es nueva en el tablero: ya participó anteriormente en un certamen local, en el que obtuvo el tercer lugar.
Para su padre, más allá de ganar, lo importante es que aprenda, que se enfrente a nuevos retos y crezca como persona. "Mientras ella lo disfrute, yo la voy a apoyar. Creo que estas experiencias la ayudan a madurar", agrega.
El torneo es parte de un esfuerzo más amplio liderado por César Pérez Rodríguez, comisionado provincial de ajedrez, quien pondera la importancia de mantener una rutina para que este deporte recupere el lugar que merece. "La importancia no está en un solo torneo, sino en realizar una práctica constante que le dé un nuevo auge. Es una actividad que recrea, forma y une a la comunidad", subraya.
Además de fomentar la destreza entre los más jóvenes, esta serie de encuentros también busca rescatar a jugadores retirados, rendir homenaje a figuras locales como José Luis Barrera y promover una visión de este juego como espacio de relajación y desarrollo personal.
Durante esta temporada se acumularán los resultados semanales para coronar al Campeón del Verano, y se proyectan actividades especiales para el 20 de julio, Día Internacional del Ajedrez, con miras a un posible evento nacional en el 2026.
