Las Tunas. – Lorenzo García Núñez sonríe cuando este reportero le hace notar que cuando el próximo año endulce su café matutino podrá sentirse parte de que tenga el azúcar para hacerlo; y es que desde su puesto en el taller de la unidad empresarial de base mantenimiento de la Empresas de Aceros Inoxidables (Acinox) ajusta piezas cruciales para que el central Antonio Guiteras pueda hacer la zafra dentro de poco.
De pie junto al torno vertical, Lorenzo vigila el girar sin cesar de una pieza que es clave para echar a andar las centrífugas del “Coloso” del municipio de Puerto Padre pueda afrontar el mayo plan de azúcar (unas 45 mil toneladas) entre los 15 ingenios que molerán en Cuba en la campaña 2024-2025.
El proceso en sí mismo no es tan complicado, explica; lo es sí, lo que ocurre antes porque en un primer turno de trabajo se prepara la máquina, dando las medidas que tienen que ser precisas; en el segundo turno, detalla, el torno hace el trabajo. Al final, el agujero donde irán los rodamientos queda con diámetro deseado. Una y otra vez el veterano mecánico revisa que todo vaya bien, a sus pies dos letras “OK” marcan las cinco piezas que ya están listas.
A su lado el especialista superior en mecánica Randolph Jiménez Cañete, señala con orgullo otras zonas del taller. “Allí reparamos equipamiento para la Empresa de Acueducto”, dice; y evoca los días duros de la pandemia de la Covid-19 en 2021 en los que desde estas instalaciones se crearon dispositivos que literalmente salvador muchas vidas al garantizar el suministro de oxígeno a los pacientes que lo necesitaban.
En total repararemos 15 piezas y al ritmo actual de labor terminaremos a tiempo para la zafra, estima el ingeniero Arcel Domínguez Creo, jefe del taller. El empeño, añade, supuso “hacer las adaptaciones pertinentes en nuestros equipos a fin de asumir el trabajo de esa cantidad de componentes”. Nuestros especialistas viajaron a Delicias, para evaluar las necesidades de la planta de cara a la próxima contienda. Eso ocurrió, cuenta, tras la convocatoria hecha por el Partido para que el empresariado tunero apoyara las reparaciones de las fábricas tuneras de azúcar. Cuando concluyan esta tarea, sostiene Domínguez Creo, tendrán una experiencia añadida que les permitirá acometer labores similares a otros ingenios del país que lo necesitasen.
“Uno siente que aporta su granito de arena a la economía del país. Siempre damos el paso al frente a cualquier tarea”, asegura el ingeniero José Luis Pérez Peña. Con más de 30 años de experiencia en el Laminador 200T el especialista superior mecánico afirma: “Tratamos de que las cosas salgan lo mejor posible y con la calidad; esa es nuestra filosofía”.