Bayamo, Granma.- En una jornada pletórica a la ofensiva para Guillermo Avilés, con tres jonrones y cinco impulsadas, los Alazanes igualaron el match de semifinales contra los Leñadores a un triunfo por bando, luego de imponerse 7x3 en el estadio Mártires de Barbados.
Con cierta similitud en los tres movimientos desde el "pentágono", al conectar lanzamientos en zona franca, Avilés resultó un "dolor de muelas" para el alto mando tunero. ¡Uno, dos y tres! El paso chévere del zurdo escondió la buena estrategia de enfrentamiento a los bateadores de importancia en la alineación granmense, pues entre Osvaldo Abreu, Alfredo Despaigne y Alexquemer Sánchez acopiaron apenas un imparable en siete turnos.
Si la motivación del toletero estuvo por lo alto, Leandro Martínez tampoco quedó atrás y con una salida de calidad alcanzó el centenar de victorias en series nacionales, en una de esas faenas que parecen con tiempo limitado y terminan en buenos registros. La veteranía de Martínez, además de la mesura sobre el box para sobrepasar los malos ratos, pudo más que las ganas del abridor tunero Cañada, en el duelo de Leandros. El novato, quien fuera sensación en la primera mitad del certamen, pero con marcado descenso en la segunda etapa, solo recorrió un tercio, en el cual permitió par de anotaciones.
La reacción de los maderos verdirrojos llegó en el cuarto episodio con un rally de tres carreras y la firma productiva de los hombres de cierre en el line up. Jean Lucas Baldoquín empujó la primera con cohete a la pradera central, mientras Yudier Rondón cazó un cambio de velocidad de Martínez, después de ocho rectas consecutivas para anotarse sencillo por el campo corto. El trío de "hachazos" provino de un error en tiro de Yulián Milán en la continuación de la jugada. Sin embargo, la contesta de los anfitriones poco se hizo esperar, pues en la siguiente aventura en el cajón de bateo, el número 21 de casa dispuso la paridad con su segundo vuelacercas.
Para Rubén Rodríguez la mala fortuna se le adelantó al séptimo y en el sexto episodio admitió las "rayitas" decisivas. Par de incogibles, incluido uno de cuatro bases, y un boleto lo hicieron saltar del montículo, acompañado además por la derrota en el choque. De ahí en lo adelante Abeysi rotó sus piezas del bullpen hasta alcanzar los servicios de cinco brazos, en aras de mantener las diferencias a la espera de un gesto de rebeldía que nunca surgió.
A manera de complemento a los envíos lentos del siniestro, Ángel Ortega optó por Lismay Ferrales, quien se adjudicó el salvamento al consumar los tres innings conclusivos.
Ambos conjuntos, luego de repartir el botín bayamés, volverán a la acción el próximo domingo desde el parque Julio Antonio Mella. Pronósticos cumplidos, por el momento, aumentan los atractivos en una pugna que involucra a los ganadores de seis títulos en las últimas siete citas beisboleras.