Las Tunas.- Son casi las 10:00 de la mañana y el bullicio en la Plaza Martiana se hace evidente, es un grupo de personas que van vestidas de blanco, negro y rojo. En sus vestimentas se lee claramente, teatro guiñol Los Zahoríes, Total Teatro y Escuela Nacional de Clown.
De pronto un silencio... se escucha la voz de alguien; luego otra y otra, en tan solo cinco minutos montan el espectáculo que bien podría parecer casual, sin intención alguna. Pero sí, ellos saben lo que hacen, están recreando la escena de aquella noche del 22 de enero de 1869, en el habanero Teatro Villanueva.
Es costumbre desde hace varios años que los teatristas tuneros se reúnan en este emblemático lugar de la ciudad, para rendir homenaje a esos que fueron capaces de decir lo que nadie se atrevía por esos tiempos.
Son los responsables de expresar el sentir de aquella Cuba por su libertad, y así lo reafirmaron los actores de Total Teatro, cuando dijeron: ¡Viva la tierra que produce la caña!
Así inicia el Acto por el Día del Teatro cubano, en el que la presidenta de la Asamblea Municipal del Poder Popular, Juana Yamilka Viñals, hizo entrega del Escudo de la Ciudad, la más alta distinción que otorga ese órgano, a Ernesto Enrique Parra Borroto, director de la compañía Teatro Tuyo.
Este galardón es la manera que encuentran las autoridades locales de decir gracias, gracias a “los Tuyos” por esa magistral obra que han creado durante estos 23 años, y a Ernesto por saberlos guiar en el mundo del clown.
“El mayor reconocimiento que tenemos los teatristas es la risa, el aplauso del público -dice Ernesto-, pero también lo es el apoyo de las instituciones, que los funcionarios vayan a ver nuestros espectáculos, que observen cómo el público nos acompaña y es capaz de recepcionar esa oferta cultural que le cuesta tanto presupuesto a un país en vías de desarrollo”.
El crecimiento cultural de una provincia es responsabilidad de su capacidad artística, somos consumidores de buena música, porque en la provincia se hace buena música, por qué no serlo también con el teatro, esta manifestación que mueve a muchos y que cuenta con un enorme talento en esta tierra.
Reconocer no es solo entregar un papel enmarcado, sino además ser capaces de ver el sacrificio que hacen día tras día estos actores, fundamentales de la escena tunera, ellos con menos tratan de hacer más de lo que pueden, pues quieren el disfrute del público.
Los reconocimientos tienen que ir más allá de las felicitaciones, y buscar estímulos reales para no sentir que actuar es un sacrificio, sino una profesión noble y sacrificada.