Las Tunas.- La gastronomía popular en esta provincia del oriente cubano pugna por salir a flote ahora que pasó la etapa más severa de la Covid-19; mientras implementa cambios importantes en la gestión de sus establecimientos aquí, dijeron sus directivos en el programa radial Punto de vista.
Al unísono de la llegada de la pandemia a nuestro país, explicaron, se implementó la modalidad de entrega a domicilio y pedidos para llevar, lo que se mantiene vigente en la actualidad con una gran aceptación por parte de los consumidores.
Luis Manuel Páez, director provincial de Gastronomía, explicó que el primer paso en los arrendamientos de las unidades a sus trabajadores estuvo encaminado a la recontratación, fundamental para rescatar todas las prestaciones que antiguamente ofrecían los establecimientos emblemáticos de la provincia. Cabe resaltar, expresó, que muchos de los recursos que disponen son gracias al apoyo de empresas minoristas.
El nuevo modelo de oferta y demanda en la determinación de los precios, aclaró, no ha impedido insistir en que los servicios gastronómicos mantengan cotizaciones asequibles a toda la población. Aun cuando se trata de productos con una alta demanda como el cigarro y tabaco, se ha establecido un sistema que permite dirigirlos hasta las bodegas, aseguró.
Es un hecho que las cantidades de pan que reciben no satisfacen las necesidades, todo lo cual repercute en la variedad de ofertas existentes en los puntos de venta de comida ligera, aunque se trabaja en la búsqueda de alternativas no convencionales que suplan dicho déficit, comentó.
No obstante, las opiniones de los consumidores dadas a conocer en el programa demostraron que el trabajo futuro se debe encaminar a bajar precios, elevando la calidad de los productos.