Las Tunas.- Estoy en el barrio México, en el corazón de lo que llaman su centro neurálgico, el más conflictivo, el más proclive a los actos delictivos. Por lo menos, eso aseguran algunos. Pero no es así, al decir de Juana Mercedes Estrada Castillo.
“Esto es fama y acuéstate a dormir. Aquí no roban; y todo el que viene que necesita algo nosotros se lo brindamos con amor. Usted puede pasar a la 1:00 o las 2:00 de la mañana que siempre habrá alguien que lo salude, pero eso otro es mentira”.
Juana Mercedes se erige en personaje folclórico de dichos lares, que con su carisma y entusiasmo arrastra a los vecinos hacia las más diversas tareas. Cuando sale de su trabajo de auxiliar de limpieza en la casa de cultura Tomasa Varona y llega a su hogar, con frecuencia se le ve inventando algo, barriendo las calles, embelleciendo una zona que se transforma para bien de sus residentes.
“Yo apoyo al delegado en todo, participo en las actividades, coordino con la gente para hacer trabajo voluntario, pintar las casas, limpiar los alrededores y poner lindo este reparto, que tiene que ser el más vistoso. Estamos muy agradecidos por lo que se hace aquí”.
Ella tiene 53 años y desde que nació vive en el mismo sitio, en este vecindario que la vio crecer y ahora es testigo de sus desvelos y empuje en beneficio de todos. Su palabra es ley si del barrio se trata, porque tiene conocimiento de causa desde que corría de un lado a otro cuando era niña y hasta hoy, cuando también corre de un lado a otro para ver qué falta y ayudar.
“Somos alegres, y eso lo puede decir el que nos visita. Siempre te van a hablar bonito del México”.
Al final del puente, ahora nuevo y que une tales predios con la llamada Feria (parque 26 de Julio), en la pared que es una suerte de frontera entre ambos extremos, hay tres imágenes emblemáticas para los lugareños, según Juana Mercedes. Una es la de San Lázaro, santo que en devoción ocupa el segundo puesto en Cuba después de la Virgen de la Caridad, y muy ligado a la santería; el músico jamaicano Bob Marley, principal figura y difusor de la música reggae, y Metron, un promotor de actividades.
“Esto es un cabildo. Celebramos San Lázaro cada 15 de diciembre y hasta el 17, colocamos naranjas, cocos, dulces; se llama el Callejón de México, porque hay que transitar por este punto para ir o venir de la Feria”.
Allí realizan diversas acciones, como un foco de cultura tradicional del Caribe, una parte importante de la comunidad, que se transforma en el tiempo, como parte del cambio en las barriadas de Las Tunas.
