
Al igual que la fecha anterior, los bates de Sancti Spíritus dejaron sin opciones a Las Tunas, desde los compases iniciales del encuentro. Hoy le tocó a Rubén Rodríguez vestir las pieles de víctima, pues apenas completó un out sobre el box, con cuatro hits y par de carreras.
El bullpen de los vigentes campeones puso un pie en el estadio José Antonio Huelga con el aval de ser el mejor de la lid; sin embargo, han sucumbido en la misión de contener a los anfitriones. Los hechos en el terreno han demostrado que cuando los abridores incumplen con la faena, las esperanzas de éxito se reducen en un porcentaje considerable. Andrés Remón, jugador de cuadro, se encaramó al montículo para la estocada final, en aras de ahorrar efectivos para el choque definitorio.
Entre Alexis Varona y Dunieski Barroso hicieron gala de productividad con una manito de remolques per cápita. Varona, ubicado de cuarto madero por detrás de Frederich Cepeda, conectó dos cañonazos, incluido un vuelacercas, en cuatro turnos, además de tres anotadas. Por su parte, Barroso promedió para 500, gracias a tres incogibles en seis visitas al "pentágono". También destacó Yunier Mendoza (5-4/ 4 CA).
Los 16 inatrapables tuneros denotan la estabilidad en el cajón de bateo, pero las facilidades concedidas por los serpentineros hacen insalvables las distancias. Yudier Rondón (4-4/ 2B/ 2 CI/ CA) significó el punto de clímax con una tarde perfecta. Aun así, José Luis Brañas contuvo lo suficiente a la artillería verdirroja para apoderarse de la dicha, tras recorrer 5,2 entradas de dos "rayitas".
La pugna sabatina dictará sentencia, mientras las hachas buscan prolongar la racha positiva en cuanto a subseries ganadas y las espuelas siguen en la batalla por ascender en la tabla de posiciones.