Puerto Padre, Las Tunas.- El hollín, proveniente de las chimeneas del central Antonio Guiteras, invade las arterias de Puerto Padre. Durante 38 jornadas de molienda, el Coloso de Delicias dibuja en el cielo del norteño municipio nubes de tonalidades oscuras, muestra del quehacer industrial.
Recuperar el estatus de máximo productor de azúcar en el país y vitalizar la economía territorial incitan al esfuerzo diario de todos los implicados en la zafra, del campo a las calderas.
Sin embargo, los diversos obstáculos amargan el panorama. En palabras del ingeniero Axel Peña Verde, administrador del central, las páginas de 26 conocieron sobre el desempeño del “gigante” villazulino.
“Hemos molido 118 mil toneladas de caña, lo que representa el 35 por ciento de la norma potencial, a causa de diversas afectaciones. En el inicio, un transformador de enlace al Sistema Energético Nacional presentó problemas, nos mantuvo con limitaciones durante una semana, sin poder utilizar algunos equipos. También hemos sufrido contratiempos industriales, sobre todo, de roturas. Asimismo, los ferrocarriles y los camiones de abastecimiento de materia prima han tenido dificultades”.
Centrar la atención en el adecuado funcionamiento de las distintas áreas, además de solucionar las averías en el menor lapso de tiempo, indican el camino de la excelencia, fundamental en la viabilidad monetaria de la unidad.
“La elaboración de azúcar marcha por seis mil 202 toneladas, con un atraso bastante grande, de siete mil 400, debido a los inconvenientes antes expuestos. El compromiso está en mantener la fábrica en las mejores condiciones, que sea capaz de moler toda la caña que se le suministre y cumplir con el plan”, comentó el especialista.
En los cañaverales comienza el control de calidad, pues a decir de Peña Verde “estamos recibiendo caña del año pasado, es decir, quedada, sin la calidad requerida, pero también está llegando con buenos atributos y de seguir así, mayor será la producción. La etapa de seca, más el clima frío están ayudando a elevar el proceso”.
La actualidad del “Guiteras” permanece lejana a las potencialidades del ingenio, de ahí la necesidad de estabilizar resultados. En tal empeño, las reparaciones oportunas juegan un rol de suma importancia.
