Eléctricos1 de Las Tunas energía renovableLos parques fotovoltaicos son buenos aliados de la economía y el medioambiente.

Las Tunas.- "Generar electricidad a partir de la radiación solar trae un impacto positivo, tanto a la economía del país como al medioambiente", esa premisa harto comprobada es un resorte que motiva a los trabajadores del sector eléctrico en esta provincia del oriente cubano, quienes celebrarán su Día, el 14 del mes en curso.

Lo reitera Manuel Antonio Alomá Magariño, director de la unidad empresarial de base (UEB) Centrales Eléctricas con Fuentes Renovables de Energía (Cefre) Las Tunas, y habla con entusiasmo sobre los resultados del pasado año, frutos de esa práctica integrada al programa para la transformación de la matriz energética en Cuba, el cual proyecta para el 2030 atender el 37 por ciento de la demanda a través de fuentes renovables, limpias y amigables con el medioambiente.

Y Alomá Magariño avala su entusiasmo: "En el 2023 cumplimos al 101 por ciento el plan de generación con una entrega que superó los 17,3 gigawatts, y con esa contribución ahorramos al presupuesto del Estado una cifra superior a los 315 millones de pesos, equivalentes al consumo de unas cinco mil toneladas de combustible fósil". 

Abunda que por ese mismo concepto disminuyeron en más de 15 toneladas la emisión a la atmósfera de dióxido de carbono (CO2), el principal gas de efecto invernadero que favorece el calentamiento global y acelera el cambio climático.

A esos resultados contribuyeron los cuatro parques solares fotovoltaicos en explotación gestionados por la entidad, que en total suman una capacidad de generación de 11 megawatts, asegura el especialista.

Detalla que la UEB administra dos parques solares fotovoltaicos en el municipio de Manatí con potencia instalada de 2,2 megawatts cada uno; e igual cantidad en el de Puerto Padre de 2,2 y 4,4 megawatts, respectivamente.

Esta UEB, adscripta a la Empresa Eléctrica Las Tunas, es rectora del proyecto de electrificación mediante sistemas fotovoltaicos de viviendas que no clasifican para su conexión al Sistema Eléctrico Nacional porque no reúnen las normas establecidas por el servicio de la manera tradicional, pues están aisladas y en lugares de difícil acceso.

En estos momentos esos beneficios se extienden a 701 inmuebles, en los cuales han instalado el sistema que tiene autonomía garantizada por baterías que acumulan cargas durante el día para iluminar las noches, agrega el directivo.

Aunque actualmente hay fallas ocasionadas, principalmente, por la caducidad de las baterías que, sometidas al uso diario sin reposición, ya no retienen la carga el tiempo planificado y otras dificultades asociadas a daños en el inversor, situación que afecta a 301 familias inicialmente beneficiadas por el programa, reconoce Alomá Magariño.

Los módulos montados disponen de paneles fotovoltaicos, dos baterías, cinco lámparas y los cables que necesita el sistema y posibilitan, además, ver la televisión y escuchar la radio, pero no pueden usarse equipos electrodomésticos de mayor potencia como hornillas eléctricas, lavadoras y refrigeradores porque pueden ocasionar daños irreparables.

 

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