Una vasta zona del Caribe se encuentra este domingo en alerta, después de que Beryl se fortaleciera hasta convertirse en el primer huracán de la temporada atlántica del 2024, con advertencias de los meteorólogos de una tormenta de categoría 4 "extremadamente peligrosa".
El estadounidense Centro Nacional de Huracanes (NHC, por sus siglas en inglés) informó que Beryl se mueve a unos 750 kilómetros al este de Barbados, en el océano Atlántico, y que espera que traiga "vientos mortales y marejadas ciclónicas" cuando llegue a las Islas de Barlovento a primera hora del lunes.
El NHC advirtió que la tormenta se está "fortaleciendo" y pronosticó que se convertirá en un "huracán extremadamente peligroso de categoría 4" al llegar a las comunidades caribeñas.
Barbados, Santa Lucía, San Vicente y las Granadinas y Granada están en alerta de huracán, mientras que Martinica, Tobago y Dominica están en advertencia por tormenta tropical, detalló el NHC en su último aviso.
En Bridgetown, la capital de Barbados, autos hacían fila en las gasolineras, mientras que los supermercados y tiendas de comestibles estaban abarrotados de compradores de alimentos, agua y otras provisiones.
Un huracán mayor se considera de categoría 3 o superior en la escala Saffir-Simpson, con vientos de al menos 179 kilómetros por hora. Una tormenta de categoría 4 tiene vientos sostenidos de al menos 209 kilómetros por hora.
Según expertos, una tormenta tan poderosa al inicio de la temporada de huracanes, que va desde principios de junio hasta finales de noviembre en el Atlántico, es extremadamente rara.
"Solo se han registrado cinco huracanes importantes (categoría 3+) en el Atlántico antes de la primera semana de julio. Beryl sería el sexto y el de más pronta aparición en este extremo del Atlántico tropical", escribió en X el experto en huracanes Michael Lowry.
Vientos de casi 145 kilómetros por hora.
El NHC señaló que a las 05H00 (09H00 GMT) del domingo, los vientos máximos sostenidos de Beryl habían aumentado a unos 160 kilómetros por hora.
La escala de Saffir-Simpson designa huracanes de categoría 1 con velocidades del viento de al menos 119 kilómetros por hora.
"Se esperan condiciones de huracán en la zona de alerta de huracán a partir del lunes temprano", agregó la entidad al advertir de fuertes lluvias, inundaciones y mareas ciclónicas que podrían elevar los niveles de agua hasta 2,7 metros por encima de lo normal.
"Las velocidades del viento en la cima y en las laderas de colinas y montañas son a menudo hasta un 30 por ciento más fuertes que los vientos cercanos a la superficie", dijo el NHC.
La Administración Nacional Oceánica y Atmosférica de Estados Unidos (NOAA, en inglés) afirmó a finales de mayo que espera que este año sea una temporada de huracanes "extraordinaria" con hasta siete tormentas de categoría 3 o superior.
La agencia citó las temperaturas cálidas del océano Atlántico y las condiciones relacionadas con el fenómeno climático de La Niña en el Pacífico para explicar el aumento de las tormentas.
En los últimos años, los fenómenos meteorológicos extremos, incluidos los huracanes, se han vuelto más frecuentes y devastadores como resultado del cambio climático.