Las Tunas.- Guiados por la brújula del VIII Congreso del Partido y teniendo en mente proyecciones de trabajo dirigidas a dar respuesta a las necesidades más perentorias de la economía y la sociedad, los comunistas del municipio de Amancio celebraron el sábado su Asamblea de Balance.
Como se esperaba y sin dejar de lado temas de alta relevancia, como la producción de alimentos y la prestación de servicios básicos, las previsiones, emanadas del más profundo y enriquecedor debate, apuntan, en primer lugar, hacia el robustecimiento de la Agroindustria Azucarera. Eso, teniendo en consideración que lleva 14 años sin cumplir el plan y que actualmente atraviesa por su peor momento, con el central paralizado, poca disponibilidad de caña y más de ocho mil hectáreas ocupadas por marabú y otras malezas.
También, porque en el transcurso de más de 100 años, esa práctica productiva ha pasado de generación en generación, razón por la cual es difícil encontrar una familia que de alguna manera no esté vinculada con el sector. Al decir de Yaquel Vargas Castañeda, reelegida en el cargo de primera secretaria del Partido, tal universo económico lleva sobre sus hombros la alta responsabilidad de aportar el 78,4 por ciento de la producción mercantil del municipio.
Por eso, el asunto promovió planteamientos muy crudos, con verdades que demostraron que muchos de los problemas que hoy lastran la actividad pudieran resolverse con más trabajo, disciplina y cohesión. Dígase, por ejemplo, el desaprovechamiento de la jornada laboral, falta de profundidad en los análisis y de seguimiento a las tareas, el conformismo presente en algunos cuadros intermedios de la Agricultura y fallas en la atención a los colectivos laborales, entre otras.
“Si hay más caña, habrá más azúcar, mejores salarios y más beneficios para la población”, así definió la importancia estratégica de la Agroindustria Azucarera, la delegada Yadisleidis Jerez Hernández.
De igual manera, las intervenciones hicieron diana en las vertientes que reclaman más atención para cubrir las 30 libras per cápita por habitantes que contempla el Programa de Autoabastecimiento Municipal, la escasez de ofertas de surtidos del agro en las placitas y mercados, el fortalecimiento de las organizaciones de masas, la atención a la juventud, así como en el loable desempeño del personal de Salud Pública contra la pandemia del nuevo coronavirus.
De modo que por el alcance de las proyecciones y la manera franca y abierta del debate, no es exagerado afirmar que esta asamblea pone al municipio de Amancio en el camino del mejoramiento de la economía y del nivel de vida de su aguerrida y combativa población.
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“Si hay más caña, habrá más azúcar, mejores salarios y más beneficios para la población”
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