Las Tunas.- Anoche, otra vez, salieron jóvenes con antorchas a recorrer las principales calles de los municipios tuneros, como en toda Cuba.
En esta ciudad, el paso estuvo acompañado por las principales autoridades políticas y gubernamentales del territorio; y, con acierto, concluyó el desfile en la Plaza Martiana, dando inicio a una velada de poco menos de una hora, en la que el arte reverenció al Maestro, con sobriedad y talento.
A él volvemos siempre los cubanos, en una especie de redescubrimiento constante del que salimos crecidos, porque encontramos allí la palabra justa, hecha a la medida de cada momento de hacer, para ser analizada a fondo y consolidar el camino.
Esta iniciativa, surgida de la Generación del Centenario, ojalá y fomente siempre las ganas verdaderas de acercarse al Apóstol, en esa suerte de hallazgo que es íntimo y depende, más que de fechas y contextos, del ardor prendido en cada cual.